Corfo: “Si las empresas no se suman a la economía circular quedarán fuera de los grandes mercados”

La creación del primer Centro Tecnológico de Economía Circular de Sudamérica, ubicado en la Región de Tarapacá; la proliferación de emprendimientos que fomentan el reciclaje, la reutilización y la transformación de residuos en nuevos productos; la entrada en vigencia de la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) por la que las empresas y exportadores deben hacerse cargo de la disposición y reutilización de sus desechos; además de las nuevas exigencias que están surgiendo en las economías más desarrolladas del planeta, que ha fijado mayores estándares ambientales para la producción de materias primas y manufacturas.
Todas estas situaciones son rescatadas por el Vicepresidente Ejecutivo de la Corporación de Fomento, Corfo, Pablo Terrazas, como puntos de inflexión para iniciar el camino de transformación de una economía lineal actual a otra circular, generando valor a lo que antes se consideraba sólo un residuo. El ejecutivo habla acerca de las iniciativas que la entidad está llevando a cabo para impulsar el desarrollo de una economía circular en el país. Gran parte de ellas, dice, enfocadas en entregar soluciones tecnológicas a problemas ambientales de las grandes industrias. "Como país legislamos y se aprobó de manera unánime el proyecto de Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (Ley REP), que justamente busca generar incentivos y obligaciones para crear un nuevo mercado, que oriente a reutilizar o reciclar los productos que ya han terminado su vida útil. Y esto tiene grandes virtudes", afirma Pablo Terrazas.
Están en marcha serie de iniciativas que requieren un apoyo del Estado y de la Corfo para que se genere, primero, investigación y luego, la implementación de nuevos emprendimientos con alto grado de innovación y tecnología para solucionar estos problemas. Una de estas iniciativas es el Centro Tecnológico de Economía Circular de Tarapacá recientemente adjudicado a un consorcio público privado donde participan 11 entidades y cuyo objetivo es desarrollar y potenciar la creación de nuevos emprendimientos tecnológicos bajo los conceptos de la economía circular, en las áreas de energía solar, sales de litio, baterías de litio y almacenamiento de energía, minería metálica y no metálica.
Para el establecimiento de este consorcio, se pondrán a disposición $21,5 millones de dólares, de los cuales caso el 50% (US$10 millones) son entregados por Corfo con los recursos generados por el acuerdo suscrito con la minera Albemarle para la explotación del litio. El resto es de los recursos será gestionado por a través de aportes del Gobierno Regional, de universidades, centros y del sector privado. "Corfo ha destinado parte de los recursos generados en base al acuerdo de explotación del litio con la empresa Albemarle para la creación de este Centro de Economía Circular que aporte con investigación y desarrollo de nuevas innovaciones y tecnologías". indica Terrazas. "Chile se puede transformar pionero en el continente en dar soluciones a estos desafíos ambientales y eso es una necesidad de una industria más ligada al conocimiento que al desarrollo de materias primas. Así vamos diversificando nuestra matriz productiva del país. Lo que más se necesita es lo que estamos haciendo a través de estos consorcios, que es juntar la academia con la industria y con el Estado y trabajar los tres unido en enfrentar estos desafíos", finaliza.